Tenés el objetivo equivocado.

¿Dónde se encuentra el verdadero propósito?

Jesús mediante su vida y sus enseñanzas nos enseñó muchas cosas importantes. Entre ellas, la respuesta a esta pregunta.

Sin embargo, en la actualidad, muy pocos son los que practican estas enseñanzas. Lo que nos enseñó Jesús se reemplaza por esta idea de que lo único que importa es buscar fama y dinero, convirtiéndolos en ídolos y diciendo que si los conseguís vas a ser “feliz”.

Todo esto son mentiras. Hoy, te voy a enseñar la verdadera respuesta a esta pregunta utilizando la fuente más confiable de toda la historia: La Biblia.

Propósito

Definición de propósito

Un propósito es la intención de hacer algo. No existe propósito sin motivación previa.

No se trata solo del propósito, primero debes revisar la motivación detrás de ese propósito.

Vos podés tener el propósito de comenzar un emprendimiento, lo que es algo bueno. Sin embargo, dependiendo de la motivación con lo que lo estés haciendo va a depender el verdadero propósito con el que estás comenzando ese emprendimiento.

Es  totalmente distinto comenzar un emprendimiento con el propósito de tratar de llenar tu vacío interior con cosas como dinero, fama, u otras que para hacerlo por un bien común y expandir el reino de Dios.

Un propósito con una motivación vacía, va a ser igual de vació. Además, directamente no tener ninguna motivación puede ser igual de dañino.

El verdadero propósito viene de servir a los demás, no de querer hacer que los demás nos sirvan. Los mejores resultados siempre se consiguen cuando nos enfocamos en ser un servidor para los demás, en todos los aspectos.

Es por esta misma razón que cuando los discípulos estaban discutiendo por quién era el más grande de ellos, Jesús dijo: “El más importante entre ustedes debe ser el sirviente de los demás; pero aquellos que se exaltan a sí mismos serán humillados, y los que se humillan a sí mismos serán exaltados.”

“Si tu don es servir a otros, sírvelos bien. Si eres maestro, enseña bien. Si tu don consiste en animar a otros, anímalos. Si tu don es dar, hazlo con generosidad. Si Dios te ha dado la capacidad de liderar, toma la responsabilidad en serio. Y si tienes el don de mostrar bondad a otros, hazlo con gusto.”

-Romanos 12:7-8

Dios te dio un don, y es tu responsabilidad utilizarlo para servir a tus hermanos, y Dios te va a recompensar por tus buenas obras.

El camino al “éxito” actual

Estás moviéndote bajo las motivaciones equivocadas.

El mundo nos vende esta idea de que cuando tengamos “x” cosa vamos a ser felices. Por ejemplo, cuando tenga plata voy a ser feliz, cuando tenga fama y gloria voy a ser feliz, etc. Nada de esto es cierto.

Una vez que obtenemos todo eso que pensábamos que nos haría felices, nos damos cuenta de lo vacías que son. Y como lo que pensamos que nos haría felices no termina de llenarnos buscamos cada vez más, hasta que terminamos volviéndonos esclavos de nuestros propios deseos.

“Nadie puede servir a dos señores, pues menospreciará a uno y amará al otro o querrá mucho a uno y despreciará al otro. Ustedes no pueden servir a la vez a Dios y a las riquezas.”

-Mateo 6:24

No podés servir a tus deseos y a Dios a la vez, ya que vas a priorizar más a uno que a otro.

Vos podés intentar seguir este camino, pero el resultado siempre va a ser el mismo: vas a salir peor de como entraste.

Seguir el reino de Dios

“Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten.”

-Mateo 6:33

Cuando buscamos al reino de Dios primero, Dios nos va a dar todo lo que necesitamos.

Las riquezas y posesiones materiales no son malas, todo lo contrario, al haber sido creadas por Dios son algo bueno. El problema es cuando caen en manos de la gente equivocada o se utiliza de forma inadecuada.

Es por esto que no necesitas vivir en la indigencia para ser un buen cristiano, esto es un mito y una mala interpretación de Las Escrituras.

“Honra al Señor con tus riquezas y con los primeros frutos de tus cosechas.”

-Proverbios 3:9

Ahora una pregunta importante, ¿A qué se refiere este versículo con “buscar el reino de Dios”?

Buscar al reino de Dios es más simple de lo que creemos, y probablemente ya lo estés haciendo. Cuando rezamos, leemos La Palabra, vamos a la iglesia y tratamos de acercarnos a Dios, a la vez estamos buscando su reino.

En conclusión, cuando nos acercamos a Dios él nos va a recompensar con todo lo que necesitamos.

Todo esto debe venir acompañado con acción. Pensar que Dios va a hacer todo el trabajo por nosotros ya no es fe, es irresponsabilidad.

Nosotros nos encargamos de poner la máquina a funcionar y Dios se encarga de obrar los milagros, pero esa es una conversación para otro día.

¿Ahora qué?

Ahora que sabes todo esto es importante responder esta pregunta: ¿Qué vas a hacer con tu vida?

“Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios. Que tu buen Espíritu me lleve hacia adelante con pasos firmes.”

-Salmos 143:10

Es nuestra responsabilidad hacer la voluntad de Dios en nuestra vida, sin embargo, es mucho más simple de lo que creemos.

La voluntad de Dios es que hagas lo que quieras mientras estés yendo por el buen camino. Dios no tiene una actividad específica para vos, no compliques de más la voluntad de Dios.

Podés armar un emprendimiento, estudiar, ir a trabajar, lo que quieras. Hagas lo que hagas si lo haces glorificando a Dios, vas a ser recompensado.

Proba diferentes cosas hasta que encuentres lo tuyo. No lo veas como una pérdida de tiempo el probar cosas a las que quizás luego no te dediques, míralo como experiencia que te puede servir para un futuro.

Ideas finales

Tu granito de arena sí importa.

Por más difícil que se pongan las cosas, no pierdas la fe en Dios, el cual es capaz de hacer cualquier cosa y obrar milagros en la vida de las personas que se lo permiten.

Tu trabajo puede cambiarle la vida a alguien, ¿No es esa acaso la remuneración más valiosa que podrías obtener?

Nuestro trabajo como cristianos es expandir el reino de Dios y salvar vidas mediante medios como este. Todavía me queda mucho camino por recorrer, pero no voy a perder la fe porque este trabajo no lo hago por mí, sino que por Dios y por todas las personas que necesitan ser salvadas mediante Cristo.

No pierdas la fe, porque Jesús está contigo.

Reply

or to participate.